Historia:
Este cuarzo proviene de las soluciones de sílice que atraviesan las capas rocosas espesándose en las cavidades para acabar cristalizándose. Los cristales finos tienen tal indicio de refracción que llega a producir el efecto Tyndall. Sólo el azul de la luz se refleja, el rojo se reabsorbe. En la antigüedad, esta piedra era conocida la virtud de disminuir los dolores debidos a los cambios climáticos.

Su acción sobre el cuerpo y el espíritu:
La calcedonia es una piedra ligera. Transmite despreocupación y ayuda a ver las cosas más positivamente. Favorece el contacto hacia los demás facilitando la escucha y ayudando a expresarse mejor. Abre una major comprensión de lo nuevo y de la creatividad y ayuda a ponerlas en práctica. Es por eso que se le dice también la piedra de la diplomacia. Tiene una acción beneficiosa en las enfermedades de las vías respiratorias y favorece la regeneración de las mucosas. Baja las altas temperaturas y disminuye los dolores debidos a los cambios climáticos. Para las madres que amamantan, es aconsejada para favorecer la producción de leche.

Su acción sobre los Chakras:
La acción principal de la calcedonia se sitúa en el quinto Chakra, el del cuello, es decir en la comunicación en general y la facultad de expresarse en particular. Físicamente hablando, se encuentra a la altura de la tiroides la cual queda regulada por el Chakra del cuello. En astrología, la calcedonia es asociada al signo de los Géminis.

El masaje con esta piedra ayuda a todo lo mencionado anteriormente además de ser muy rico y relajante.